Anna Nicole Smith, la conejita Playboy que se casó con un millonario de 89 años y se quedó sin herencia.
Anna Nicole Smith sabía como hacer para no pasar desapercibida. Tuvo una vida envuelta en escándalos. Nació en un pequeño pueblo de Texas y fue madre soltera muy joven. Pero detrás de ese origen humilde soñaba en grande, muy en grande.
Anhelaba la fama, el éxito y el reconocimiento. Siempre quiso ser modelo y fue uno de los sex symbol más importantes de la década del 90. Aspiraba a trabajar en televisión y particip en seis películas. Pero detrás de sus triunfos y sus grandes curvas, se escondía una fragilidad emocional, producto de una infancia tormentosa, que contribuyó a su trágico final.
Las controversias también rodearon su corta vida. A los 26 años se casó con un magnate petrolero de 89, que falleció un año después de contraer matrimonio con ella. Además, terminó sin herencia después de una larga lucha judicial. Su primer hijo falleció de sobredosis y ella, hundida en una profunda depresión, murió a los 39 años por un cóctel de medicamentos.
Se podría decir que la vida de Anna tuvo una intensidad inusual para la mayoría de las personas. Pasó de trabajar en un restaurante de pollo frito y ser stripper a tenerlo todo, absolutamente todo. Dinero, reconocimiento y clamor popular. Pero también, sobre sus últimos días de vida, estuvo en quiebra y sin alguien que le brinde amor verdadero.